El método Lean Startup

Imagina que hubiera un manual para asegurar el éxito de tu producto o servicio.

Pues, no lo hay. Pero El método Lean Startup es una gran versión de uno.

Estas ideas me han acompañado a lo largo de los años, y me han ayudado a crear un negocio valuado en +$2M.

Construir-Medir-Aprender 🔄

Crea rápidamente una versión imperfecta de tu producto.

Preséntalo al mercado cuanto antes, y recopila datos sobre su rendimiento.

Usa estos datos para informar el próximo ciclo.

Para tener éxito debes poder adaptarte y mejorar con eficiencia.

1. Construir

No me refiero a gastar meses o años perfeccionando tu producto.

Me refiero a crear una versión básica, algo que capture la esencia de tu idea.

Esto se conoce como un Mínimo Producto Viable o MVP.

Queremos probar nuestra idea rápidamente, sin gastar demasiado tiempo o recursos en algo que aún no ha sido validado.

2. Medir

Lanzas tu producto al mercado y observas cómo reaccionan los usuarios.

Recopila datos, observa las interacciones, solicita comentarios.

Este paso nos da una visión real y tangible de cómo se percibe y se utiliza nuestro producto.

¿Los usuarios están enganchados?

¿Encuentran valor en él?

¿Hay algún problema técnico?

Estas son algunas preguntas que debemos responder.

3. Aprender

Este es el momento en el que reflexionamos sobre los datos y el feedback que hemos recopilado.

Si nuestro MVP es un éxito, genial, continuamos mejorándolo.

Si no lo es, aquí es donde tomamos una decisión crítica.

¿Debemos hacer un pivote?

¿Hay algún aspecto del producto que necesita un cambio radical?

O quizás, con todo lo aprendido, ¿descubrimos una dirección completamente nueva que es aún más prometedora?

Y luego, con lo que hayas aprendido, vuelves a empezar el ciclo.

Construir, Medir, Aprender.

Así es como los emprendedores se mueven, se adaptan y, finalmente, triunfan en el mercado.

Muy bien, pero ¿y ahora qué?

La belleza de este proceso es que es iterativo.

Pero para realmente aprovechar su potencial, hay que entender cómo adaptarse y moverse basándonos en lo que aprendemos.

Pivote vs. Perseverancia

Algunas veces, después de pasar por el ciclo, te darás cuenta de que estás en el camino correcto.

Tu idea es sólida y solo necesita algunos ajustes o mejoras.

Eso es perseverancia.

En otras ocasiones, los datos y el feedback te mostrarán que necesitas hacer cambios más drásticos. Aquí es donde entra el concepto de “Pivote”. Imagina que estás jugando al baloncesto y necesitas cambiar rápidamente de dirección. Eso es un pivote.

Significa que, aunque mantienes un pie firme en lo que has aprendido, cambias la dirección de tu estrategia o producto basándote en ese conocimiento.

Pivotear es una señal de que estás escuchando, aprendiendo y dispuesto a adaptarte.

Métricas Accionables vs. Métricas de Vanidad

Las métricas accionables son aquellas que te dan una visión real de cómo está funcionando tu negocio o producto.

Por ejemplo, cuántos usuarios regresan después del primer uso.

Las métricas de vanidad suenan bien, pero no necesariamente te indican el verdadero estado de tu negocio.

El típico el número total de visitas.

Tus visitas pueden ser muy altas, pero si esas personas no usan tu aplicación, ¿realmente importa?

No te dejes engañar por números grandes o llamativos.

En su lugar, enfócate en lo que realmente impulsa el crecimiento y el éxito.

Desarrollo Continuo

Esperar demasiado puede ser el fin de una gran idea, por eso debes adoptar un enfoque de desarrollo continuo.

En lugar de grandes lanzamientos que toman meses o años, busca maneras de hacer mejoras incrementales y constantes.

Adoptando un ritmo rápido y un flujo constante de retroalimentación, puedes adaptarte a los cambios del mercado mucho más rápidamente.

Y reducir el riesgo de dedicar demasiado tiempo y recursos en características que quizás no sean importantes para tu audiencia.

Hipótesis de Valor

Todo negocio comienza con una suposición, una idea.

En lugar de cruzar los dedos y esperar lo mejor, trata las ideas como hipótesis que pueden ser validadas o refutadas.

En vez pensarlo como una idea.

Ej: “Voy a crear una app de meditación”.

Plantealo como una hipótesis.

Ej: “Creo que las personas pagarán por una aplicación que les ayude a meditar”

Y comienza el trabajo es validar o refutar esta hipótesis.

Utiliza el ciclo Construir-Medir-Aprender paras probar rápidamente hipótesis.

Incluso si no funciona estarás bien, porque puedes aprender de ello y adaptarte.

Al tratar tus ideas como hipótesis, te permites a ti mismo la libertad de aprender y mejorar, hasta que funcione.

Estos principios son más que solo teorías.

Son herramientas que, cuando se aplican correctamente, pueden transformar tus ideas en negocios prósperos 😉

Portada de El metodo Lean startup

The Keys Are
Under The Rug

get up & get in